Juan 20, 2-8: Ser testigo del resucitado

Reflexión diaria del Evangelio por el P. Luis Zazano

1) Salieron: Esa es la actitud de Juan. Es un apóstol joven y fuerte. Y como todo joven, le mete pasión a lo que hace. Cree en el Maestro y constantemente lo busca. Se bancó el momento de la crucifixión y ahora va a confirmar que su Maestro está vivo, que Cristo vive y reina; que la muerte ha sido vencida. Hoy tenemos que salir, dejemos de estar dando vueltas en lo mismo y con cara de amargados. Salgamos porque Cristo ha resucitado, salgamos a buscar a Jesús porque está vivo, y a la gente que está muerta… para que viva por Jesús. Salí, corre, camina, contagia la alegría de los cristianos, mostrate alegre, juvenil. Pone pasión a lo que haces, allí está tu fuerza.

2) Vio: Hoy volvé a ver a Jesús, trata de encontrarte con Él. Volvé a encender esa llama que te da vida y que en un momento te dio vida. Fíjate cuándo te tocó Jesús, porque hoy las vendas están tiradas, pero acomodadas. Lo que te ata o lo que te ató, Cristo ya lo redimió, ya te sacó; con Él y el tiempo todo quedará acomodado. Todo se va a acomodar. Cree, confía. Ve a tu alrededor que hay luz, que caigan las vendas de tus ojos. Mírate lo que sos. Hoy mírate al espejo en algún momento del día y fíjate que sos libre, no hay atadura en vos. No dejes que nada ni nadie te haga su esclavo. No sos esclavo de nadie. Si sos el esclavo de Jesús, hasta el mismo Jesús te quiso liberar y te llamó Hijo de Dios, porque no quiere que seas su esclavo. Quiere que seas su hijo, su hermano.

3) Creer: Me encantó aquella frase del Papa “una fe sin crisis es una crisis de fe”. El creer es un proceso y nosotros vamos haciendo un camino. No siempre va a estar a full el wifi de la conexión con Dios en el cielo, habrá momentos que te costará la oración y hasta incluso no vas a tener ganas de orar. Forma tu fe, lee la vida de los santos, estudia el catecismo, habla con alguien tus dudas. Eso es lo lindo que tenemos en nuestra fe, que se puede profundizar y explicar muchísimo. Es hacer teología. Pero viví, porque tu vida y la mía es creer para celebrar, celebrar para vivir y vivir para orar. Algo bueno está por venir.